ORDEN MASÓNICA MIXTA INTERNACIONAL – LE DROIT HUMAIN

Masonería para hombres y mujeres
Varias Logias que trabajan bajo los principios de una sola constitución componen una "Obediencia" o agrupación masónica. Durante el siglo XIX, la extensión de los derechos, incluido el acceso de las mujeres a los derechos civiles, fue una lucha constante. El 14 de enero de 1882, la periodista, Maria Deraismes, se convirtió en la primera mujer en iniciarse en la masonería en una logia masculina. Pero será necesario esperar once años, hasta el 4 de abril de 1893, para que Maria DERAISMES y el doctor Georges MARTIN, masón y feminista, creen la primera Logia Masónica en París, un evento revolucionario en el mundo masónico de "No mujeres".
De esta Logia surgirá la Orden Masónica Internacional LE DROIT HUMAIN en 1901, la cual afirma, por primera vez en una Obediencia, la igualdad de hombre y mujer. Los otros grandes principios son: el internacionalismo, la continuidad iniciática del 1 ° al 33 ° grado según el Rito Escocés Antiguo y Aceptado o R.·. E.·. A.·. A.·. , así como la negativa de cualquier dogmatismo.
GRANDES MAESTRES, TENÉIS LA PALABRA
Lo universal hacia el cual queremos tender es un ámbito infinito que nos supera, donde todo es posible, donde todo queda por ser descubierto. ¡La divisa del Rito “Ordo ab chao” y nuestro internacionalismo nos dejan entrever que aspirar a lo universal es una utopía accesible.

Aquellos principios, en nombre de los cuales nuestra Orden se ha construido, son cuatro: libertad, igualdad, fraternidad, laicidad, y son los cimientos de todo nuestro empeño.

Trabajamos todos, cada uno a nuestra manera, en esta gran cantera de la construcción del Templo de la Humanidad para que la luz del conocimiento, con la que todos queremos se iluminados, y la luz de la fraternidad, que queremos ser capaces un día de transmitir, brillen siempre con más fuerza.

Nuestra terminología, los símbolos del Templo de la Humanidad y del Progreso de la Humanidad, nos muestran claramente que nuestro objetivo no es egoísta, sino colectivo.

La Masonería ha elegido la vía del progreso contrariamente a dogmatismos que buscan instalar lo ilusorio en lugar de lo real, contraria a los que rechazan evolucionar por incomprensión o interés.

El símbolo no es la Masonería propiamente dicha. Al contrario, su uso es, podemos decir, consustancial a humanidad.

La francmasonería trabaja para la edificación de un vasto Templo abierto a todas las concepciones culturales, morales y espirituales, para que ellas ayuden al hombre a liberarse de sus dificultades, a elevarse, a progresar…

Sacad del todo que formamos la fuerza necesaria para ser vosotros mismos, y devolved después a todos la vida enriquecida que habéis recibido del conjunto.

El asesinato, el robo, la violación, el libertinaje, el hambre, la enfermedad, la miseria y la ruina son el cortejo habitual de las guerras.

Ser buenos, tolerantes, y fraternales ¿No es la bondad la cualidad primordial del Masón y no implica ella a todas las demás? Ser bueno exige ser tolerante. Ser bueno exige ser fraternal.

Vivimos todavía, digan lo que digan, bajo el imperio de la moral cristiana, de esa moral que la Iglesia, en el Syllabus, ha proclamado incompatible con la sociedad civil laica y libre.

“Gracias a nuestra organización, la mujer trabaja con su marido en nuestras columnas y todo secreto entre ellos se elimina”.

“Somos los obreros a quienes dieron la piedra, dieron las herramientas, expusieron los planos necesarios para la edificación del Templo”.

“¡A la Gloria de la Humanidad! Trabajemos por la Fraternidad entre todos los humanos, por la Paz, entre todos los pueblos de la Tierra, por el advenimiento de la justicia social, por la proclamación del DERECHO HUMANO”.

“En realidad, la mujer es una fuerza. Media humanidad, si ella se confunde con la otra por los caracteres y generales y comunes, se distingue por las aptitudes especiales de una potencia irresistible y que constituyen un aporte especial, esencial e indispensable en la evolución integral de la humanidad”.

No basta, en nuestra opinión, que la francmasonería se ocupe de la emancipación del hombre. Si quiere alcanzar los resultados que se propone tiene que trabajar simultáneamente por la emancipación de la mujer.

La OMMI LE DROIT HUMAIN reúne a sus miembros bajo un mismo techo en condiciones de igualdad, sin importar su grado masónico; agrupados en diferentes países por Federaciones, Jurisdicciones o Logias Pioneras, para favorecer el intercambio de información y la coordinación de las síntesis de sus trabajos.
Se rige por las leyes francesas de 1901 y los decretos del 12 de abril de 1939 y del primero de junio del mismo año. Sus estatutos fueron depositados en el Ministerio del Interior Francés el 22 de agosto de 1978, estando a la fecha vigentes. La sede en Francia es 5 rue Jules Breton, 75013 París.
Nuestra Organización tanto a nivel internacional como nacional busca el desarrollo y progreso de la sociedad orientados por los principios de Libertad, Justicia, Equidad, Tolerancia, para conseguir el ideal de una humanidad unida por lazos fraternales.

LA OMMI LE DROIT HUMAIN EN EL MUNDO
FEDERACIONES
Países donde existen mínimo cinco logias azules o simbólicas, más de ciento veinte miembros, y mínimo un taller de altos grados.
Americana
Australiana
Austriaca
Belga
Brasileña
Británica
Búlgara
Canadiense
Colombiana
Española
Finlandesa
Francesa
Helena
Islandesa
Italiana
Malgache
Neerlandesa
Africana Occidental
Paraguaya
Polaca
Portuguesa
Escandinava
Sud-Africana
Suiza
JURISDICCIONES
Países donde existe un mínimo de dos Talleres y treinta Maestros Masones activos